Hace unos días, encontré una rana en mi baño.
La explicación es sencilla: el estío en el bosque tropical seco esta en su mejor momento. Hace casi 8 meses que no llueve y en mayo la temperatura alcanza los 38 grados. Como buen anfibio, la rana necesita todo el tiempo frescura y humedad; un cuarto de baño es idóneo para refugiarse.
Es simple, es sólo una rana.
Pero a mi se me antojaba más que una rana... me asaltó una imagen insólita, como salida de un sueño inquietante en el último confín de mi imaginación.
Entonces, a base de juegos de luces y sombras, la rana se transforma en una figura que apenas pertenece a este mundo.
Y en respuesta a la pregunta: ¿De donde ha salido esa rana?
Bueno, si les digo... no me van a creer.
Saludos al respetable y al no tanto
2 comentarios:
Salio de allí de donde estoy pensando ... en la última fotografía ??
Increible !!!
Te dejo mis saludos y un fuerte abrazo.
Bela companhia para o banho.
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